La adicción al juego tiene importantes consecuencias en la calidad de vida del adicto al juego y su entorno cercano.
Esta enfermedad representa una forma de dependencia, en la cual el individuo desarrolla una necesidad psicológica y/o biológica con consecuencias negativas que le producen displacer y resultados desfavorables en su calidad de vida, y aun así necesita del juego para experimentar un estado de bienestar físico o mental. La dependencia se genera cuando el objetivo de su conducta tiene como objeto superar un malestar emocional, más que obtener placer.
Las consecuencias negativas se presentan en todas las áreas de la vida del sujeto, teniendo repercusiones, psicológicas fisiológicas y sociales que se traducen en resultados negativos a nivel personal, familiar, social.
Carmen Gloria Morales Simkins

A continuación un emotivo video que muestra la realidad de la ludopatía y sus posibles consecuencias: